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Sargazo en Quintana Roo, catastrofistas y realidades: ni todos los días, ni en todos lados

*Gracias a la visión de Mara Lezama, no solo se contiene el sargazo, se transforma en oportunidad, al crear productos sustentables, tratamientos ecológicos y cadenas de valor

Por Joaquín Quiroz Cervantes

Como cada año, con la llegada del calor, no solo recala el sargazo en ciertas zonas costeras del Caribe Mexicano, también lo hace la fauna de opinólogos catastrofistas –esa que jamás ha pisado una playa a ras de arena, pero que pontifica desde sus oficinas en la Condesa o desde curules olvidadas por la razón– intentando vender la idea de que en Quintana Roo se nada entre algas, desesperanza y negligencia.

Y no, no es así.

Es momento de aclarar las cosas con la verdad por delante: el sargazo no llega todos los días, no está presente en todas las playas, y no es un fenómeno exclusivo de México ni causado por los gobiernos estatales. Basta ya de usar la ignorancia como estrategia política.

El fenómeno tiene nombre y apellido: calentamiento global, corrientes oceánicas alteradas, y un gigante invisible llamado Mar de los Sargazos, que genera desde hace más de una década un recale masivo en distintas costas del Caribe, desde Florida hasta las Antillas. Esto no es novedad. Lo nuevo, lo que realmente debe destacarse, es que en Quintana Roo sí se está actuando con estrategia, coordinación y resultados.

Desde que era presidenta municipal de Benito Juárez, Mara Lezama Espinosa dio muestras claras de que no venía a tomarse la foto con una palita de playa en la mano, sino a armar estrategias de contención, limpieza y mitigación con visión de largo plazo. Hoy, como gobernadora, ese compromiso se ha multiplicado.

Hace apenas unos días, se instaló la Mesa de Estrategia de Sargazo 2025, una iniciativa sin precedentes donde participan los tres órdenes de gobierno, encabezados por la mandataria estatal.

Aquí no hay improvisaciones ni poses para la prensa: hay calendarios de acciones, monitoreo satelital, barreras anti sargazo, tratamiento sustentable de la macroalga y coordinación directa con la Marina, la SEMAR y organismos ecológicos. El objetivo es claro: tener playas limpias el mayor tiempo posible para locales, turistas y para quienes vivimos del mar y del turismo.

Pero claro, los vendedores del desastre no descansan. Ahí está, por ejemplo, el panista Ernesto Sánchez Rodríguez, burócrata de micrófono fácil, ignorancia sólida y trayectoria gris, que desde la lejanía de Cuajimalpa intenta hacer creer que en Quintana Roo estamos hasta el cuello de sargazo. ¿Su verdadero objetivo? Figurar en algo y, como todo buen discípulo del “chespirato”, ver cómo hace negocio del tema. Lo mismo con la siempre intrascendente senadora Mayuli Martínez, cuya única especialidad legislativa ha sido hacer mutis cuando se requiere firmeza y hacer ruido cuando lo que se necesita es sensatez.

La realidad es que Quintana Roo tiene playas limpias, protocolos activos y municipios comprometidos. Isla Mujeres, Cozumel, Bacalar, Holbox y amplias zonas de la Riviera Maya muestran diariamente que el trabajo coordinado sí da resultados. Por cada recale, hay un operativo. Por cada tramo afectado, hay una respuesta inmediata. Y por cada crítica ignorante, hay evidencia científica y técnica que la desmiente.

Hoy, gracias a la visión de Mara Lezama, no solo se contiene el sargazo, se transforma en oportunidad, al crear productos sustentables, tratamientos ecológicos y cadenas de valor que generan empleos y protección ambiental.

Así que ya basta de gritar “¡se hunde el barco!” desde el confort de la ignorancia. En Quintana Roo las cosas se hacen distintas. Y ante el sargazo, como ante los agoreros, hay firmeza, hay estrategia y, sobre todo, hay resultados.

Porque en este gobierno, como bien dice Mara Lezama, “el dinero se cuida, se planea, y se destina para lo que es importante: el bienestar de la gente”.

Y sí, eso también incluye nuestras playas. Aunque a algunos les arda más que el sol de Cancún.

Así que favor de no alarmar, menos mentir, ya para eso tuvimos con el sexenio pasado, hoy las cosas en Quintana Roo son distintas, se está trabajando, hay una estrategia, y el sargazo está atendiendose, para mentiras, desinformación, y fake news ya estuvo bueno, y menos se va a permitir por voces externas, neoliberales, enclaustradas en otras latitudes, que no tienen nada que opinar de lo que no saben ni de lo que no les incumbe.

Curva peligrosa…

La llegada de Mi Gas Natural a Cancún, Playa del Carmen y Puerto Morelos está generando grandes expectativas en el sector empresarial de la región. Con la promesa de ofrecer una alternativa energética más económica y sostenible, se abre un nuevo capítulo para la industria local.

Las expectativas son altas, pues los empresarios vislumbran una oportunidad para reducir costos operativos, al mismo tiempo que se fortalece el compromiso con la sostenibilidad y la innovación.

Esta incursión no solo impulsará la competitividad de las empresas locales, sino que también contribuirá al crecimiento de la infraestructura en la zona, consolidando a Quintana Roo como un referente de modernización energética en el país. Las perspectivas son prometedoras, y con ello, la ilusión de un futuro más eficiente y conectado con las necesidades del desarrollo empresarial y el bienestar de la comunidad.

Y recuerden… esto es sólo para informad@s, si ustedes no estuvieran ahí leyendo yo no estaría aquí escribiendo, y si ser Malix el Huso Horario, el Whatsapp, el Facebook, X, la CFE, López, el Covid19, los troles y envidiosos nos lo permiten, nos leemos pronto, Dios mediante, pero que sea XLaLibre.

Mi correo: quirozjoaquin@yahoo.com.mx. Sígueme en X @joaquinquirozc y Facebook porlalibrecolumna #Xlalibre #yotambiensoymalix #soyquintanaroo

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