*Se recomienda reducir al máximo los lugares de propagación, como recipientes y espacios en donde se pueda encharcar y estancar el agua
*Realizan campañas de fumigación y limpieza en municipios
Gabriela Cruz Valdés
Quintana Roo. La época de lluvias y de temperaturas altas es la temporada más común para la propagación del dengue, una enfermedad tropical viral transmitida, principalmente, por la picadura de mosquitos infectados del género Aedes, especialmente Aedes aegypti.
El dengue se propaga a través de la picadura de mosquitos infectados con el virus, que suelen poner sus huevos en aguas estancadas y limpias, lugares que se vuelven más comunes durante la temporada de lluvias.
Una vez que el mosquito pica a una persona infectada con el virus del dengue, puede transmitirlo a otras personas mediante próximas picaduras.
Por el riesgo que representa la enfermedad para las personas, autoridades de los ayuntamientos de Quintana Roo realizan campañas de limpieza y fumigación en las zonas más vulnerables, para evitar la propagación del mosquito trasmisor.
Se recomienda reducir al máximo los lugares de propagación, como recipientes y espacios que pueden ser criaderos del mosquito trasmisor, entre estos, floreros y bebederos de animales, u otros objetos en patios y jardines.
Es importante protegerse de las picaduras utilizando repelentes de insectos en la piel expuesta, de preferencia orgánicos; vestir ropa de manga larga y pantalones largos, al amanecer y anochecer, principalmente, que es cuando los mosquitos son más activos; así como colocar mosquiteros en ventanas y puertas, o sobre las camas.
Síntomas del dengue
Las personas infectadas con dengue llegan a presentar fiebre leve hasta fiebre hemorrágica grave que puede ser mortal. Los síntomas más comunes son: fiebre alta repentina, dolor de cabeza intenso, dolor detrás de los ojos, dolor en músculos y articulaciones, náuseas y vómitos, así como sarpullido.
La variante más grave, conocida como dengue hemorrágico, puede llevar a una disminución del nivel de plaquetas en la sangre, shock y muerte, si no se trata adecuadamente.
Para evitar la propagación de la enfermedad en la actual temporada de lluvias, las autoridades municipales y estatales realizan acciones preventivas coordinadas de difusión y educación comunitaria, con el propósito de mantener entornos libres de lugares de reproducción de mosquitos y proteger a la población de las picaduras.